9788485895328
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Para la Iglesia católica, los libros canónicos son aquellos que ella misma acepta como revelados por Dios, es decir, los que han sido escritos bajo la sugestión, inspiración o incluso el dictado directo del Espíritu Santo, por oposición a los apócrifos, que son los que no reconocen como tales. El término Apócrifos significa también escondido, oculto, es decir aquellos Evangelios que han sido rechazados y ocultados por la Iglesia por muy distintos motivos.
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LOS EVANGELIOS SECRETOS. EVANGELIOS APÓCRIFOS. (Bolsillo)
Para la Iglesia católica, los libros canónicos son aquellos que ella misma acepta como revelados por Dios, es decir, los que han sido escritos bajo la sugestión, inspiración o incluso el dictado directo del Espíritu Santo, por oposición a los apócrifos, que son los que no reconocen como tales. El término Apócrifos significa también escondido, oculto, es decir aquellos Evangelios que han sido rechazados y ocultados por la Iglesia por muy distintos motivos.
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Formato | Rústica |
Publicación | 2007 |
Medida | 11.6 x 16 x .9 |
Peso | 0.096 |
Páginas | 128 |
Autor | V.V.A.A. |
Editorial | Ela |
LOS EVANGELIOS SECRETOS. EVANGELIOS APOCRIFOS . De la Natividad e Infancia de Jesús
Para la Iglesia católica, los libros canónicos son aquellos que ella misma acepta como revelados por Dios, es decir, los que han sido escritos bajo la sugestión, inspiración o incluso el dictado directo del Espíritu Santo, por oposición a los apócrifos, que son los que no reconocen como tales.
El término Apócrifos significa también escondido, oculto, es decir aquellos Evangelios que han sido rechazados y ocultados por la Iglesia por muy distintos motivos.
En un primer momento fueron aceptados por la Iglesia católica más Evangelios de los que actualmente son reconocidos como canónicos, pero pasados los años y los diferentes Concilios, los intereses y las opiniones fueron cambiando y Evangelios antes autorizados, más tarde fueron rechazados y considerados apócrifos.
Las causas eran muy diversas, los dogmas de fe iban cambiando de acuerdo a los distintos intereses, generalmente más políticos que religiosos, con lo cual la historia se iba alterando y adaptando al gusto y necesidad del gobernador, es decir del Papa y de la Iglesia de turno.