Claudia Franco inició en 1997 una aventura interior de consecuencias asombrosas. En el norte de Alemania comenzó un retiro en el que se mantuvo 21 días sin comer, de los cuales estuvo siete sin ingerir tampoco líquidos. Ese fue solo el principio. Sus retiros llegaron a ser de 40 días sin comer ni beber, haciéndolos cada vez más periódicos, hasta un punto...